Mis muy queridas hermanas. Yo, Isis, el Principio Femenino Sagrado de esta Humanidad, vivo en cada uno de vuestros corazones, estoy presente y en vosotras en cada cosa que sentís y hacéis también hoy, pues sabed que el tiempo y el espacio no existen realmente.
Los seres humanos hemos permitido que nuestro corazón quedara en el olvido de las profundidades del alma humana; y la mente ha ocupado el lugar primero en nuestras vidas. El “principio masculino” mal aspectado ha dominado la Tierra, el ansia de poder, el orgullo y el materialismo han enterrado al Amor verdadero.
Nuestra Madre, Gaia, grita dolorida por ella y por sus hijos, pues es preciso despertar ¡AHORA! la conciencia femenina sagrada que duerme en el corazón olvidado. Es necesario que la Vida y el Amor retornen a la Tierra, que la Luz y el Poder del Padre/Madre guíen nuestro camino.
Queridas mías, sólo la energía femenina sagrada es la que tiene fuerza para transmutar la energía masculina y femenina mal aspectadas, pues en ella obra Dios.
Yo, cual guerrera de Luz y del Corazón amoroso sequé mis lágrimas y me puse en marcha para recuperar los pedazos perdidos de mi amado Osiris… ¡hasta que todos fueron hallados y recolocados!
¡Levantaos dentro de vosotras mismas, sanad nuestras energías mal aspectadas para que pueda emerger el Amor Sagrado de vuestros corazones! Recuperaos a vosotras mismas transmutando las energías masculinas negativas que hay en vosotras y después podréis empujar e iluminar al hombre, pues sabed que él, los hombres, os necesitan; necesitan un “Sagrario” para su Templo, ansían cuidaros, protegeros y volver a tener dentro de sí mismos la energía de la Madre Sagrada que da Calor, Amor y Vida.
La Tierra, la Madre Gaia, os llama, hermanas. Apoyaos las unas a las otras, amaos y cogidas de las manos, con vuestros corazones en uno solo, avanzad por la vida. Usad la espada del discernimiento cuando haga falta, con vosotras mismas las primeras y luego aplicad el bendito bálsamo del amor en las heridas y el dolor.
Es tiempo de recuperación, de despertar de la conciencia, de amor, de permitir que la verdadera Vida resurja para esta Humanidad. Vosotras sois las que pariréis esto y después acunaréis al Hombre Nuevo en la Nueva Tierra que habréis soñado para todos.
¡Os amo, hermanas! ¡Os bendigo!
¡Permaneced en alerta, en activo servicio desde vuestro amoroso corazón!
ISIS
De: Mar Rodelgo
Aparici1965@hotmail.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario